¿Estamos educando a nuestr@s hij@s en un consumo responsable o les damos todo lo que nos piden, aunque no lo necesiten?
Juguetes, videojuegos,golosinas,..."caprichos"
4 comentarios:
Anónimo
dijo...
Todos los días mi hijo pequeño, que cursa 1º de primaria acostumbraba a pedir algún capricho: un huevo Kinder, un pequeño juguete, algo... no era nada que realmente necesitara, ni nada especialmente caro, algo a lo que sabía que quizás acabaría por comprarle. Hoy día todo incita al consumismo. Al salir del super siempre tienen las cajas llenas de pequeños caprichos y golosinas a los que los niños no se resisten. He luchado y aún a veces tengo que seguir haciéndolo, resistiendome a sus peticiones a las que me niego y procuro esperar a que haya ocurrido para que así pueda sentirse recompensado por su actitud, bien en el colegio o en casa. Si siempre tienen lo que piden no sabrán valorar y perderán la ilusión por los regalos en los días especiales: su cumpleaños, el día de Reyes. Según va creciendo cada vez pide menos, sabe que no lo consigue. Así al menos conseguiré que viva con ilusión y valore realmente un regalo. Su hermana mayor, cursa 6º. Ya lo entiende perfectamente y nunca pide nada que no necesite realmente. Si maduran con una buena educación, podrán resistirse algo más al consumismo que también ataca a los mayores. Catalina Sánchez, madre de Irene y Lorenzo Cano.
es verdad que nosotros los padres somos los primeros, tambien movidos por la sociedad, y los demas padres, con la intencion de no ser de menos; lo que les compramos todo. y llevarlos a consumir pues es mejor ir a consumir al centro comercial que ir de rutas ecológicas a la pedriza por ejemplo. nos creemos que somos mejores si consumimos.
Intentamos educar a nuestros hijos en un consumo responsable, aunque ellos se "pidan todo". Nosotros, los padres, le compramos lo que necesitan, y sí es verdad que a veces "no siempre", caemos en el deseo de satisfacer sus demandas, haciéndolo de forma de recompensa ("premiamos porque se lo merecen o a cambio de algo"). Por tanto, no siempre les educamos en un "consumo responsable".
Consumismo es el consumo repetido e indiscriminado de bienes no absolutamente necesarios. Se dice que no posee más el que más tiene, sino el que menos necesita y es evidente, que tanto adultos como niños disponemos de muchas cosas de las que podríamos prescindir sin resultar perjudicados, pero vivimos en una sociedad de consumo, en la que lo vanal se nos muestra como absolutamente necesario para ser felices.La obesidad, la ansiedad, la adicción a las compras... son propias de la sociedad del derroche en la que hay que hacer un enorme esfuerzo para no ser una de sus víctimas.Hacer una lista de lo que necesitamos,asignarle un presupuesto y saber decir "no" puede sernos muy útil.Nuestros hijos harán lo mismo porque seguirán nuestro ejemplo.
4 comentarios:
Todos los días mi hijo pequeño, que cursa 1º de primaria acostumbraba a pedir algún capricho: un huevo Kinder, un pequeño juguete, algo... no era nada que realmente necesitara, ni nada especialmente caro, algo a lo que sabía que quizás acabaría por comprarle.
Hoy día todo incita al consumismo. Al salir del super siempre tienen las cajas llenas de pequeños caprichos y golosinas a los que los niños no se resisten.
He luchado y aún a veces tengo que seguir haciéndolo, resistiendome a sus peticiones a las que me niego y procuro esperar a que haya ocurrido para que así pueda sentirse recompensado por su actitud, bien en el colegio o en casa. Si siempre tienen lo que piden no sabrán valorar y perderán la ilusión por los regalos en los días especiales: su cumpleaños, el día de Reyes.
Según va creciendo cada vez pide menos, sabe que no lo consigue. Así al menos conseguiré que viva con ilusión y valore realmente un regalo.
Su hermana mayor, cursa 6º. Ya lo entiende perfectamente y nunca pide nada que no necesite realmente.
Si maduran con una buena educación, podrán resistirse algo más al consumismo que también ataca a los mayores.
Catalina Sánchez, madre de Irene y Lorenzo Cano.
es verdad que nosotros los padres somos los primeros, tambien movidos por la sociedad, y los demas padres, con la intencion de no ser de menos; lo que les compramos todo. y llevarlos a consumir pues es mejor ir a consumir al centro comercial que ir de rutas ecológicas a la pedriza por ejemplo. nos creemos que somos mejores si consumimos.
Intentamos educar a nuestros hijos en un consumo responsable, aunque ellos se "pidan todo".
Nosotros, los padres, le compramos lo que necesitan, y sí es verdad que a veces "no siempre", caemos en el deseo de satisfacer sus demandas, haciéndolo de forma de recompensa ("premiamos porque se lo merecen o a cambio de algo"). Por tanto, no siempre les educamos en un "consumo responsable".
Consumismo es el consumo repetido e indiscriminado de bienes no absolutamente necesarios. Se dice que no posee más el que más tiene, sino el que menos necesita y es evidente, que tanto adultos como niños disponemos de muchas cosas de las que podríamos prescindir sin resultar perjudicados, pero vivimos en una sociedad de consumo, en la que lo vanal se nos muestra como absolutamente necesario para ser felices.La obesidad, la ansiedad, la adicción a las compras... son propias de la sociedad del derroche en la que hay que hacer un enorme esfuerzo para no ser una de sus víctimas.Hacer una lista de lo que necesitamos,asignarle un presupuesto y saber decir "no" puede sernos muy útil.Nuestros hijos harán lo mismo porque seguirán nuestro ejemplo.
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